20 de noviembre de 2009. Washington. Jura el cargo el nuevo Presidente de los Estados Unidos de América. Durante el juramento Obama comete un fallo. Un error sin consecuencia, al poco después volvería a hacer el juramento, y a hacerlo bien. ¿Por qué repetir algo? ¿Qué más da? Sí da. A lo largo de la historia, el cambio de una palabra o de una simple ceremonia ha dado lugar a increíbles modificaciones, a grandísimas ramificaciones.
25 de diciembre del año 800 d.C. Basílica de San Pedro Apóstol. Roma. Nos encontramos con dos personajes de gran talla frente a frente. Carlomagno, rey de los francos y el Papa León III. Al levantarse el rey de la tumba del apóstol el papa le impone la corona de emperador. Y al verlo sus súbditos lo aclamaron entre grandes vítores, era un gran gesto del Papa. Así es como nos lo cuentan los Annales Regni Francorum*.
Pero Carlomagno salió completamente ofendido del edificio. ¿Cuál eran sus motivos?
En la época de los Césares y de los emperadores romanos, a los que este rey quería asemejarse (sobre todo a Constantino el Grande ), la ceremonia establecía que el augusto era proclamado por el pueblo, su elector, y sólo después (hay que recordar esto por el poder de las imágenes) el sacerdote mayor lo ratificaba. Prevalece la jerarquía temporal.
León III cambió completamente el orden. Por lo tanto ahora sería Dios el que lo proclamaba y el pueblo, posteriormente, lo ratificaba. El poder de elegir a su rey pasaba de las manos del pueblo a las manos de Dios.
La Iglesia, con este simple hecho, se convertía en la figura dominante en el poder terrenal ya que este emanaba del papal. Prevalece la jerarquía espiritual. Durante la Edad Media llegaría a excomulgarse a reyes, a quitarles el respaldo divino. Nadie osaba oponerse a los designios del Papa. Habrá que esperar a Carlos I de España y V de Alemania, para ver una desobediencia clara al Sumo Pontífice (6 de mayo de 1527).
Por lo tanto, la imagen que nos evocan los Anales es obviamente una tergiversación de la realidad para quitarle importancia a este crucial asunto.
Al estar agachado el Papa se adelanta y le corona y el pueblo, sin ver bien lo que pasa, sigue con su papel, gritar vítores al rey.
Un simple cambio en el rito cambió por completo el curso de la historia. El por qué de tanta suspicacia.
*El fragmento donde se relata este suceso lo podemos encontrar, junto a una interesante biografía de este personaje,en Breve Historia de Carlomagno,de la Editorial Nowtilus. Un libro importante en el desolado paraje sobre la investigación de Carlomagno.
Para ver el libro:
http://www.brevehistoria.com/?isbn=9788497635493
Para ver la colección: www.brevehistoria.com
Para ver la página de la editorial: www.nowtilus.com
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